Este libro nos cuenta la historia de un hombre que está obsesionado en coleccionar artículos que tengan alguna coneccion con o paranormal, así que cuando lo invitan a una subasta de un traje que dicen que quien posea dicho traje también será el poseedor de su portador. Lo que este hombre no se imagina es que en cuanto sea el dueño de dicho traje también será dueño de un espíritu muy vengativo que lo único que desea es destruirlo.
Yo se que muchos tal ves me odien por esta confesión pero me inclino más por Joe Hill que por Stephen King, aunque claro que el hijo tiene la clara escuela de su padre en cuanto a escritura se refiere y eso se nota mucho en sus novelas.
Joe Hill nos muestra en esta novela a personajes bastante atormentados, y así como los conocemos en el presente también nos da una muestra de su pasado para conocerlo mucho mejor.
El autor sabe cómo jugar muy bien con este tipo de terror, y es que todo el tiempo hacia que la piel se me pusiera chinita, ya que vemos por momentos como este ente logra penetrar en la psique de los personajes y así logra que hagan cosas inimaginables.
Todo el tiempo vemos esta persecución contra reloj al tiempo que nuestros protagonistas se empiezan a degenerar un poco.
El cimax del libro es llevado estupendamente y no puedo pensar n una resolución mejor que la que él autor le dio a su libro, me movió muchísimo los adentros, y sin duda me pareció bastante hermoso aunque su libro haya sido de terror.
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