Todo comienza una noche, en la que dos amantes "aparentemente" no pueden estar juntos, por lo que en cuanto se abrazan y se besan todo termina para ellos.
Inmediatamente después conocemos a Luce, una chica que toda su vida ha visto "sombras", como ella las llama, por lo que su familia y todos los que la rodean creen que padece serios problemas mentales, por si esto fuera poco ella se ve envuelta en un misterioso incendio que termina con su primera conquista muerto y ella inexplicablemente sale ilesa de aquel incidente lo que hace que todo el mundo sospeche. Por este motivo es ingresada a Espada & Cruz, un instituto especial donde solo admiten a adolescentes que ya hayan tenido algún altercado contra la ley, ahí conocerá a Daniel, un chico increíblemente apuesto del que ella se siente irremediablemente atraída y hace hasta lo imposible por acercarse a él y descubrir el oscuro pasado que envuelve a este misterioso chico.
Este libro no es nada de lo que yo me esperaba y no lo digo en un buen sentido, ya que resultò ser una total y completa desiluciòn. Sin embargo diré que el haber leìdo otra saga de àngeles anteriormente le resto bastantes puntos, ya que prefiero mil veces la trilogìa de El mundo del mañana. Tal vez si los hubiera leìdo recien empece a comprarlos me habrìa gustado mucho màs ya que lo reconozco era una fiel amante de Crepùsculo y Oscuros tiene ciertos tintos que me parecieron haber visto antes.
Juro que apenas llevaba 2 pàginas leìdas, y Luce me dio una impresión de ser una chica caprichosa y berrinchuda, creì que eso se quitarìa conforme lo fuera leyendo pero resulto que no solo reforzó esa imàgen, sino que ademàs se me hizo bastante estùpida, sus decisiones en ocasiones (por no decir la mayor parte del tiempo) se me hacen muy ilògicas, bastante manipulable y que encima persigue al galan de una manera ridiculamente desenfrenada llegando a caer en una obsesiòn que a mi se me hizo bastante patètica.
Lo ùnico que me parece bastante interesante y original es el lugar en donde se desenvuelve todo, ya que no es muy comùn hallarnos en alguna clase de reformatorio para adolescentes.
La mayor parte del tiempo yo sentì que no sucedia nada relevante, pasaba las pàginas y Luce seguìa en lo mismo, Daniel seguìa en lo mismo y todo los personajes seguìan en lo mismo, y cuando por fin empieza a suceder lo que tanto se espera, ocurre de una manera practicamente invisible, que no me dejo disfrutar lo que estaba leyendo.
La autora tiene una manera bastante fàcil y sencilla de escribir, aunque me pareciò que habìa partes en las que abusaba de las muletillas, en especial de la "y".
Me dejo con un montón de dudas, que sin duda se iràn descubriendo a lo largo de los otros tres, pero incluso en el epìlogo me costò un poco entender que estaba pasando.
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