Edmundo Dantes parece tenerlo todo en la vida. Esta a punto de convertirse en el capitán de un navio muy importante y tiene el amor de la mujer que ama, por lo que la envidia hace presencia y es acusado injustamente y por ello es encarcelado en el castillo de If cuando es solo un joven.
Ya cuando es adulto y cree que pasará toda su vida en ese lugar tan sombrío, conoce a alguien que le dará el valor necesario para escapar, y aparte le dará los recursos necesarios para cumplir con su venganza y hacer pagar a todos aquellos que lo encarcelar on. Así es como nace el Conde de Montecristo.
Aunque me encanta la forma narrativa de Alexandre Dumas y este libro no fue la excepción si tengo que aceptar que aunque le tenía más ganas a esta obre que a los tres Mosqueteros, fue esta segunda opción la que terminó gustando me más. Aún así disfrute mucho de este clásico y comprendo porque es que ha traspasado la barrera del tiempo.
Por momentos me desenganchaba un poco de la historia, pero con esa misma facilidad el autor hacía que me volviera a enganchar en ella.
Aún así, es una historia llena de venganza e intrigas en la que honestamente las motivaciones e los "villanos" para hacer lo que le hacen a Edmundo Dantes, se me hicieron muy básicas y no fue tan sorprendente como con los tres mosqueteros, y perdonen que compare estas dos historias pero las leí una seguida de la otra así que es como muy imposible no hacerlo.
Sin embargo a pesar de que los otros personajes no lograron cautivarme realmente el protagonista de la historia me enamoro por completo, por lo que cuando él no salía, que es en muchos capítulos, perdía un poco el interés.
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